lunes, agosto 04, 2008

DEL NOMBRE DE ESTE BLOG

El neologismo que da nombre a este blog apareció publicado por primera vez en el número de "Vicálvaro Informativo" correspondiente a los meses de Julio-Agosto de 1999.
Dice así:


Foto: Felipeángel y Raquel (c)



"HORMIGACIONES"


No hace mucho tiempo el paisaje de Vicálvaro era como la Televisión de entonces: en blanco y negro; el humo de la Fábrica ponía un tono gris en nuestras vidas y los balcones y nuestras sábanas no olían a neftalina ni a rosas sino a toque cuartelero y a cemento.
El Camino de la Estación era una vía desierta flanqueada por árboles fantasmagóricos. En los días de ventisca la lluvia se posaba en sus ramas con un letargo febril y, al escampar y secarse con la luz del sol, aquellos bultos pétreos que formaban la conjunción del agua con el resuello mortal de las chimeneas parecían bubones apestosos reproduciéndose en extremidades descarnadas. Cuando creíamos que aquellos árboles tenían la querencia de las esculturas de Miró aparecía una hoja y eso nos obligaba a pensar que, a pesar de las condiciones adversas que imponía a su entorno la portentosa actividad de la Fábrica, la vida seguía su curso implacable.
Entrada la primavera crecía la hierba en los eriales, se agrandaban de gozo los hormigueros ,florecían, como corazones de izquierda, los pirigallos y un mundo animal, diminuto y prodigioso, renovaba su ciclo genético con la exactitud lasciva de un reloj lunar.
Pasado un tiempo se construyó una Estación nueva sobre la osamenta lastrada de la antigua, se pavimentó el Camino, se pusieron farolas y desaparecieron los árboles muertos de asfixia, cansancio y abandono. La niebla de cemento continuó posándose, como la lengua de un tigre en el lecho de un manantial, en las baldosas de las terrazas y en los nidos ajenos de los cuclillos, pero un buen día alguien decidió dar un respiro a nuestros pulmones decretando el cierre de la usina cementera.
Ahora un ejército de ocupación que responde a las iniciales FCC ha invadido con máquinas diversas el territorio limítrofe con aquel Camino, tantas veces hollado, y el que denominan de Los Cabestros, causando con sus maniobras, mortales de necesidad, innumerables bajas en la población que lo habita, y el éxodo masivo de quienes, en el último momento, lograron salvarse; de modo que no resulta extraño observar el lentecido paso de las lombrices arrastrándose por la llanura de las aceras, el triste sino del exilio que se adivina en el movimiento parsimonioso de los escarabajos, la precipitada carrera de los grillos cruzando, como una orquesta de violinistas locos, la sábana gris del asfalto, y las copiosas, fatigadas colas de las hormigas en sus constantes, forzosas HORMIGACIONES.

Felipeángel (c)

1 comentario:

Ele Bergón dijo...

Ahora en este 2008, mucho ha cambiado ese Camino de la estación, aunque en primavera yo aún sigo viendo pirigallos, pero el asfalto y el ladrillo lo ocupan casi todo y las hormigas lo tienen difícil en sus "hormigaciones".

Te voy a dar una noticia triste que no sé si conocerás. En el accidente que hubo el domingo día 3 por la noche en la rotonda nueva de la Avenida del Este, murió el hijo de Emy, la amiga de Ino. Creo vosotros la conociais. Ayer por la mañana estuve con ella un ratito y estaba inconsolable.

El tiempo es así nos trae recuerdos buenos y malos a igual que el presente.

Un abrazo